Me lleva a escribir este post el estar actualmente desarrollando un plan de empresa (el 2º en mi vida) y volver a ver que, bajo mi punto de vista, los planes de empresa actuales tienen poco de actuales. Me explico.
El plan de empresa, así como toda la información que contiene es un muy buen ejercicio para valorar si vas a ser capaz de llevar a cabo un negocio, si vas a contar con suficiente margen, cuándo crees que vas a empezar a ganar dinero, etc. Si por ejemplo quieres montar un negocio «super novedoso» tipo Groupon está claro que necesitas saber que vas a necesitar un chorro de comerciales y dejarte bastante dinero en publicidad (y qué te cuesta ambas cosas) para a cambio conseguir ventas ( cuántas ventas y cada cuanto crees que te comprarán). También necesitas ver cuanta gente hace lo mismo que tú (competencia). A partir de ahí planteas cuanto dinero crees que necesitas desde que arrancas tu negocio hasta que el volumen de ventas compensa los gastos y si no salen los números… pues ya ni siquiera empiezas. Vamos, lo que se conoce comunmente como un «baño de realidad».
Ahora bien, esos datos con los que planteas el bussiness plan inicial , en el mundo actual son bastante cambiantes (puede surgir un competidor y arrasar en 2 meses o situaciones similares) y no ocurría así (o al menos no en tanto grado) con negocios del siglo pasado. Si montabas una fábrica de metalurgia te bastaba con saber que te vale el alquiler mensual de la nave, cuánto gastas en agua, luz, electricidad, etc y quienes son tus proveedores. Podías pedir incluso referencias a algún amigo o conocido para afinar más la puntería. Y eso rara vez cambiaba… Actualmente con el gran número de usuarios de internet, con la competencia atroz que hay, con los nuevos tipos de negocio que surgen cada día y sobre todo con la globalidad de la red es muchísimo más difícil dar en el clavo con los números (los bussiness plan siempre fallan) y conseguir que las hipótesis que el mes pasado valían éste mes no valgan. Sí, es verdad, podemos (y debemos) actualizar constantemente nuestro plan de empresa a fin de que refleje los datos más precisos posibles cada vez que lo presentamos a algún inversor/entidad o similar pero creo que no es la solución.
Creo que la solución pasa por adoptar modelos de representación tipo Lean Canvas mucho más gráficos, visuales, simples y editables fácilmente. Modelos de representación como ese (propios de la filosofía Lean Startup) junto con una «demo» del producto y datos que respalden tus hipótesis (si son cuando el proyecto está online mucho mejor) deberían ser suficientes para conseguir lo que a mi parecer son las bases de un buen plan de empresa:
- Una guía sobre el camino a seguir. Que en éste caso podrás modificar sin muchos quebraderos de cabeza
- Si estás buscando inversión deberías poder convencer a un inversor de que tu proyecto vale lo que pides
Entiendo que un inversor quiera ver números para ver si le compensa o no invertir en tu proyecto; buscan rentabilidad muy alta puesto que el riesgo también es alto. También entiendo que no vayan soltando dinero al primero que pasa; primero porque es suyo y segundo porque fomentarían el «vete a ver a ese que da pasta» y sin un «filtro» eso puede ser un error garrafal. Pero también creo que habría que dar con una metodología mucho más flexible a la hora de presentar un proyecto de internet y no recurrir al típico Word «quijotesco» y el típico Excel en el que multiplicas un crecimiento de un 5% mensual y al final te forras 😉
Si avanzamos con el tipo de empresas del siglo XXI debemos avanzar con la forma de presentarlas… vamos, digo yo.