Te ha pasado, lo sé. Porque nos ha pasado a todos. Ofreces unos servicios excepcionales pero no conoces cómo promoverlos, cómo contárselo y transmitírselo al mundo. Has oído hablar de otros profesionales que emplean Internet con éxito y sin embargo no te atreves (bien por comodidad o bien por incomodidad) a dar un paso al frente y diseñar tu página web, tu ventana al mundo donde hablar acerca de quién eres, qué piensas y cómo trabajas.
Con el objetivo de aportar un poco más de claridad a tu visión, me he decidido a compartir contigo algunos de los puntos que vas a necesitar para poder promocionar tus servicios.
¿Por qué necesitas promocionarte?
Las personas no son adivinas, no saben que existes y no saben tampoco muy bien qué haces. Ser bueno no es suficiente. «Si soy bueno, vendrán» es la misma cantinela que el «Mi proyecto es tan bueno que no necesitaré Marketing, el boca-oreja hará todo». Y como ves, no es cierto. Cuántas veces te ha sucedido que alguien te habla de otra persona y dices… «ah, ¿esa persona hace eso que necesito? no tenía ni idea».
Necesitas promocionarte para dar a conocer qué haces, cómo lo haces y para quién lo haces.
¿Cuál es mi cliente ideal?
Pensar que podemos ayudar a todas las personas es un error. Por ese mismo motivo no podemos servir a todos los cliente potenciales que quisiéramos. Por ese mismo motivo debes elegir para quién quieres trabajar, a quién quieres ayudar. Hacer un «retrato robot» de ese cliente ideal te ayudará muchísimo. ¿Cómo piensa, qué páginas visitas, cuáles son sus inquietudes y temores? Saber al máximo te va a ayudar.
Y cuando lo tengas… céntrate al máximo en ese tipo de cliente.
La otra cara de la moneda y que en ocasiones se obvia es… ¿cuál NO es mi cliente ideal?. Aquel con el que no concuerdo en mis valores personales, al que no puedo ayudar o que no tiene actitudes que van alineadas con las mías. Este tipo de clientes consume muchos recursos y no podemos entregar valor a nuestro máximo nivel porque simplemente, no encajamos. Ese cliente no tiene nada malo, seguramente con otra empresa trabaje mejor que contigo, y precisamente por ello no vamos a trabajar con él.
Además este cliente ideal tiene un «problema en potencia» que a simple vista puede resultar imperceptible. Y es que, si queda satisfecho con tus servicios, va a recomendarte a otros «clientes no ideales» con lo cuál vas a entrar en una espiral de no estar cómodo con el tipo de clientes con el que trabajas, ya que no es tu cliente ideal.
Cómo promocionar tus servicios online
La labor número uno que tenemos como emprendedores es promocionarnos.
Para ello lo primero que necesitamos es explicar de forma abierta y clara qué hacemos. A veces da la sensación de que se tenga vergüenza a hablar de forma abierta de que somos entrenadores personales, fisioterapeutas, quiroprácticos o abogados. No malinterpretemos, cuando hablamos de ello no se hace con la intención de convencer a todo el mundo de que sea cliente nuestro, sino para lograr que esas personas conozcan en todo momento lo que hacemos y puedan hablar de nosotros a otras personas dentro de su círculo cuando necesiten a un profesional como nosotros.
Simplemente facilita que conozcan lo que haces, y no separes la delgada línea que divide al que facilita una buena elección a las personas a las que ayuda del que insiste una y otra vez.
Para darlo a conocer te recomiendo:
- Una marca personal sólida. Basada en tus valores personales y en el público al que vas a dirigir tu mensaje.
- Una página web. Que sea un vivo retrato y un vivo calco de tu marca personal. Limpia, clara y al grano.
- Estrategia de contenidos. No hay mejor modo de mostrar abundancia de conocimientos que compartirlos
